Lejos de darle miedo una potencial subida de tipos, Lucas Monjardín defiende que este escenario no tiene por qué ser malo para la renta fija. Aunque la subida fuera instantánea de 100 puntos básicos, el director de Inversiones subraya que el impacto del primer año se atenuaría a lo largo de los próximos. “Incluso con una subida violenta, a largo plazo es rentable”, contextualiza.
No obstante, Monjardín cree que habrá, y prefiere que así sea, una subida gradual de los tipos de interés. “Los bancos centrales van avisando para que el efecto inicial no sea tan pernicioso”, apunta. El director de Inversiones piensa que, ante un escenario de subidas, con haber bajado la duración no es suficiente, sino que según suban los tipos, habrá que reinvertir a tipos más altos porque tendrá un efecto multiplicador.
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